martes, 12 de mayo de 2009

Oscar Wilde. El retrato de Dorian Grey


Podemos perdonar a un hombre haber hecho una cosa útil en tanto no la admire. La única disculpa de haber hecho una cosa inútil es admirarla intensamente. Todo arte es completamente inútil.


No he buscado nunca la felicidad ¿Quiénes desean la felicidad? He buscado el placer.


Los dolores y los amores superficiales sobreviven. Los grandes amores y las grandes penas se destruyen por su propia plenitud.

En cuanto a los presagios, no existen tales cosas. El destino no nos envía heraldos. Es demasiado sabio o demasiado cruel para eso.

Usted y yo somos lo que somos y seremos lo que seamos. En cuanto a ser envenenado por un libro, no existe tal cosa.. El arte no tiene influencia sobre la acción. Aniquila el deseo de obrar. Es soberbiamente estéril.


- ¿Qué es lo que usted me ha dicho? Sencillamente, que sentía admirarme demasiado. No es ni siquiera un cumplido.
- No he intentado que lo fuera. Era una confesión. Y ahora, una vez hecha, me parece que me he desprendido de algo mío. Quizá no deba uno expresar nunca su adoración con palabras.


La tragedia de la vejez no consiste en ser viejo, sino en haber sido joven.


La incertidumbre enamora.


Hay algo infinitamente mezquino en las tragedias ajenas.

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