lunes, 28 de diciembre de 2009

Piglia, Ricardo. Prisión perpetua.


La construcción de la vida está dominada por los hechos y no por las convicciones. Algunos tratan de quebrar esa ley. Son los alquimistas de sí mismos.


Beber es una actividad seria, desde siempre asociada con la filosofía. El que bebe, dice Steve, intenta disolver una obsesión. Hay que definir primero la magnitud de la obsesión. No hay nada más bello y perturbador que una idea fija.



El Pájaro es un narrador tradicional, por eso intercala reflexiones y máximas en medio de sus historias. En el fondo es una forma de retardar la acción. Pensar es un modo de crear suspenso, dice. Construir un espacio entre un acontecimiento y otro acontecimiento, eso es pensar.

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Arenas, Reinaldo. Celestino antes del alba


- Ay, ahora se me ha olvidado, ¡Pero sé que a medianoche se me ocurrió una idea maravillosa!...
- Pero, ¿por qué no me la dijiste entonces?
- Sí te la dije; ¿no te acuerdas?
- No.
- Pues yo te la dije, lo que pasa es que a ti también se te ha olvidado..
- Vamos a dormirnos de nuevo para ver si se te vuelve a ocurrir la idea. Y si se te ocurre me llamas corriendo.
- Está bien. Ya estoy dormido.
- Yo también.
- Ya estoy soñando.
- Ya estoy soñando.
- ¡Aquí está la idea!
- ¡Ya la oigo! Pero se me olvida en seguida, una palabra hace "páfata" y se la lleva a la otra, y de la única que me acuerdo siempre es de la última. Trata de meter todo el sueño en una sola palabra para ver si así no se nos olvida.
- No puedo.
- Trata.
- No puedo. Es un sueño larguísimo.
- Larguísimo...
- No lo puedo decir con una sola palabra.
- Palabra...
- Yo quisiera poder hacerlo así pero no puedo.
- Puedo...
- Fíjate si es largo el sueño que horita despierto y todavía no he terminado de soñar.
- Soñar...
Hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas, hachas...

- Y tú, ¿quién eres? -dije yo.

- El duende- dijo el duende.

- ¿Y qué quieres?

- El anillo de la reina- dijo.

- ¿Qué Reina?

- La del anillo.
***
(...) he llegado a ti solamente para hacerte el bien. Para que razonaras y te dieras cuenta de las cosas que no ves y te ven. Que no presientes y te dominan. Y te aturden. Pero has sido necio (...)

domingo, 6 de diciembre de 2009

Sabina, Joaquín




TU INJUSTICIA POR MI MANO

Tus mohines son menos inocentes
que tus patines y tus espinillas,
líbreme Alá de las adolescentes
sagitario, con rímel y en cuclillas.

Declino estar un mes con agujetas
por dármelas contigo de judoka,
mi sarampión no admite más recetas
que el flan de chocolate de tu boca.

Antes de la serpiente, el paraíso
era un friso de arcángeles paganos
copulando sin morbo ni permiso.

Por tu culpa en mis tórridos veranos
la palma de los dedos de narciso
se toma tu injusticia por mi mano.