viernes, 13 de junio de 2025

Michaelides, Alex. La furia

 (...) se perdería entre los bastidores de su memoria. Fin

Esos son los desquiciados contorsionismos a los que nos sometemos las personas heridas: estamos desesperadas por recibir amor, pero cuando nos lo dan, no somos capaces de sentirlo. Esto ocurre porque una creación artificial, una "máscara", no necesita amor. Lo que necesitamos, lo que anhelamos con desesperación, es obtener amor para lo único que jamás le enseñaremos a nadie: el niño feo y asustado que llevamos dentro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario