Higiene del asesino
-Basta haber hecho algo una sola vez -pero a fondo- para no dejar de hacerlo durante toda la vida. Para ello, resulta imprescindible que la escena crucial sea estéticamente perfecta.
(...) pertenece a este populacho de nuevo cuño al que le gustan los nombres paganos. Usted sería de las que llaman a sus hijos Krishna, Élohim, Abdallah, Tchang, Empédocles, Toro Sentado o Akhénaton, ¿verdad? Grotesco. Yo prefiero los nombres cristianos. Por cierto, ¿cuál es su nombre?
Matar al padre
Lo que más me impresionó fue aquella monstruosa paciencia.
Matar al padre
Lo que más me impresionó fue aquella monstruosa paciencia.
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